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Maravillosa pieza de corazón con la Pietá y la Virgen y el Señor glorioso. Su forma de corazón, le da originalidad y hacen de esta pieza una única. Mide 4 x 3,5 cms.
Sobre la Pietá:
Esta medalla en forma de corazón es una pieza que conmueve por la delicadeza con la que representa la Piedad: María sosteniendo en su regazo el cuerpo de Jesús, un momento de profundo amor y entrega. El esmalte pintado a mano muestra un trabajo minucioso: los tonos azules y dorados realzan la gloria celestial que envuelve a ambos, mientras que la serenidad del rostro de la Virgen transmite consuelo y esperanza incluso en el dolor.
La composición, enmarcada en plata, crea un equilibrio perfecto entre arte sacro y elegancia. Es una joya que no solo adorna, sino que invita a contemplar el misterio del amor redentor y la ternura de una Madre que sostiene al Salvador. Una pieza ideal para quienes desean llevar cerca del corazón un símbolo de fe, belleza y devoción profunda.
Esta medalla en forma de corazón captura con exquisita delicadeza la unión sagrada entre Jesús y María, representados con miradas que irradian paz, ternura y perfecta comunión espiritual. El esmalte pintado a mano revela detalles dorados que simbolizan la gracia divina que envuelve a ambos, mientras que la corona de cada uno recuerda su gloria eterna.
La suavidad de los rostros y la armonía de los colores hacen de esta pieza un icono de amor puro y fidelidad absoluta a la voluntad de Dios. Más que una joya, es un recordatorio cercano de la presencia amorosa de Cristo y de la maternidad espiritual de María.
Ideal para quienes desean llevar junto al corazón un signo de fe, protección y belleza sagrada. Una pieza única que inspira devoción y serenidad.